JUEVES 1 DE MARZO DEL
2018.-
Películas muy
oscarizadas (el domingo 4 se entregan los preciados Oscar en Hollywood,
ceremonia que transmitirá TNT) y buenas argentinas, un mix que tiene público
cautivo. Se reestrena Dunkerque, como sucedió la semana pasada con Huye!
UN VIAJE A LA LUNA
De Joaquín Cambre. Opera
prima. Con Leticia Bredice. Angelo Mutti Spinetta, Angela Torres, Germán
Palacios, Luca Tedesco, Luis Machín. Nos cuenta la vida de “Tomás” quien debe
una materia en el cole, sufre las comunes diferencias con su familia, y se
enamora de Iris. La Luna será un viaje especial para salir de los “tormentos”
cotidianos… La crítica nacional le da el “OK” a esta producción nacional.
NOCHE DE JUEGOS
De John Francis Daley y
Jonathan Goldstein. Con Jason Bateman, Rachel McAdams, Kyle Chaldner, entre
otros. Es la típica comedia de enredos con thriller, acción, romanticona. Max y
Annie se casan y, ludópatas asumidos, compiten con los matrimonios amigos.
“Noche de Juegos o Game Night no es demasiado buena… Sería
difícil justificar por qué alguien debe gastar su tiempo y su dinero en esto…
La película se agota en sí misma y al espectador”, de Jon Frosch, The Hollywood Reporter.
NECROMICRON
De Marcelo Schapces.
Basada en el Libro de los Muertos, del que se encuentra, oculto, un ejemplar en
la Biblioteca Nacional de Buenos Aires. Diego Velázquez, Cecilia Rossetto,
Daniel Fanego y el recordado Federico Luppi acompañan a Nico García, Victoria
Maurette, Claudio Da Passano, entre otros. Film de género- Terror nacional con
buena repercusión.
LA MALDICION DE LA CASA
WINCHESTER
De Michael y Peter
Spierig. Con Helen Mirren, Jason Clarke. La casa Winchester existe, era la
mansión de la viuda del creador del rifle Winchester. Es considerada una
mansión maldita, plagada de espíritus malignos. Esa situada a escasos
kilómetros de San Francisco, CA:
“Es un misterio que actores del talante de Helen Mirren y
Jason Clarke hayan aceptado protagonizar esta aburrida cinta efectista llena de
lugares comunes del género. El subtexto… queda sepultado por una dirección
torpe y una historia desperdiciada”, de André Didyme-Dome,
Rolling Stone, Colombia.
“Ni las miradas fulminantes de Helen Mirren pueden salvar a
este horrible revoltijo de postergeist…”, de Tim Robey,
Telegraph.
OPERACIÓN RED SPARROW (GORRIÓN
ROJO)
De Francis Lawrence.
Con Jennifer Lawrence, Joel Edgerton, Jeremy Irons, Charlotte Rampling,
Matthias Schoenaerts, Sergei Onopko, entre otros. Música de James Newton
Howard. Fotografía de Jo Willems. Duración: 139 minutos.
XXXXX- ESPÍAS, SEXO Y TORTURAS
Cuando un guion falla,
no hay caso. La narración resulta descolgada y el espectador tiene un
rompecabezas en el que varias piezas quedarán sin ubicar. No porque no tengan
espacio sino porque son de otra historia. Operación Red Sparrow, o Gorrión
Rojo, se basa en la vida de “Dominika Egorova” (Jennifer Lawrence) quien es una
“etoile” del Bolshoi hasta que se quiebra una pierna y cae en manos de su tío, haciéndose
cargo de la economía de sobrina y cuñada, en pleno periodo comunista. La idea
perversa está planteada de entrada. Será el encantador pariente quien sumerja a
Dominika en un entrenamiento de espionaje basado en la prostitución de chicas y
chicos.
El objetivo de Dominika
es “Nate Nash” (Joel Edgerton), funcionario de la CIA que tendría relación con
un “topo”. Hasta aquí todo es bastante normal. El tema está en la narración
propuesta por el austríaco-norteamericano Francis Lawrence, quien hace gala de su
gusto por la perversión dado que la violencia se genera en forma gratuita. Se
salta de una escena sexual a otra de sutil enamoramiento para pasar a un living
donde uno de los protagonistas está desnudo, atado y sometido a escalofriantes
acciones de un torturador. El entrenamiento de Dominika, bajo la mirada de la
malvada Charlotte Rampling en el papel de “jefa” del cuartel, es abominable y
vejatorio para hombres y mujeres.
Si bien encontrar al
“topo” mantiene el halo de thriller, se produce una serie de giros en la trama
y queda colgado: el que se anuncia como tal resulta que maneja todo. Es decir,
una alteración del guion o confusión en postproducción que termina por
desbaratar el hilo conductor de una historia que atrapa pero que, al mismo
tiempo, revuelve el estómago.
Elsa Bragato
LADY BIRD
De Greta Gerwig. Con Saoirse Ronan, Laurie Mercalf, Lucas
Hedges, Timothée Chalamet, Trady Letts, entre otros. Fotografía de Sam Levy.
Música de Jon Brion. Duración: 94 minutos.
XXXXX-RETRATO CÁLIDO Y EMOTIVO DE LA ADOLESCENCIA
Greta Gerwig tiene 34
años y es la quinta mujer nominada como mejor directora a los premios Oscar con
su opera prima, Lady Bird. Oriunda de Sacramento, California, ubica a la
protagonista Lady Bird, seudónimo que la alterada Christine (Saoirse Ronan)
elige, en su ciudad, un “alter ego” con el que puede retratar con sin
cortapisas su propia adolescencia. Lady Bird cursa el último año del secundario
y quiere ser una gran estrella, estudiar en las universidades más caras del
Este de los Estados Unidos, y dejar la mediocridad que siente en su Sacramento
natal desde el entorno del colegio
católico, al que detesta, a la lucha económica de su familia.
El retrato que hace
Gerwig de las actitudes femeninas a esa edad, la búsqueda del primer amor, de
parecer más que ser, los celos, la oposición a las palabras maternas, se siente
como tal, autoreferencial como dijimos, y extremadamente honesto y cálido.
La actuación de Laurie
Mercalf como la madre es notable: el llanto espontáneo, la severidad para
contener a una hija que se le “cuela” por los cuatro costados, y el apoyo del
padre, Larry (Tracy Letts), un contenedor y cálido esposo y papá que se las
arregla, a pesar de las dificultades, para que su hija cumpla con sus sueños.
Aparece el nuevo valor
de Hollywood, Timothée Chalamet, a quien vimos en el protagónico de “Llámame
por tu nombre”, otra película oscarizada. En este caso, al joven con quien Lady
Bird tendrá relaciones sexuales por primera vez y podrá decirle a su íntima amiga
Julie (Beanie Feldstein) “ya lo hice!”. Su primer novio, Danny (Lucas Hedges, de
Manchester junto al mar), queda como un gran amigo por razones que son
convenientes descubrir en la película.
Hay corazón, calidez,
honestidad sin pretensiones de ser más que un excelente producto de módico
presupuesto con una directora que está nominada a los Oscars y que reflejó, de
manera notable, los sentimientos de una jovencita de 18 años, sus “berrinches”
y sus comienzos en la adultez. Estupenda!
Nota de redacción:
recordamos el film “Retrato de Abril”, o “Pieces of April” (2003) sobre la
independencia de una adolescente, encarnada por Katie Holmes, y dirigida por
Peter Hedges.
Elsa Bragato