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jueves, 28 de enero de 2021

UNA TUMBA PARA TRES, BUITRES-LA CARA SALVAJE DEL CAPITALISMO, RECOMENDACIONES, JUEVES 28 DE ENERO DEL 2021

 

JUEVES 28 DE ENERO DEL 2021.-

UNA TUMBA PARA TRES

De Mariano Cattaneo. Con Diego Cremonesi, Daniel Pachecho, Damián Salomón, Chucho Fernández, Hernán Márquez, Mónica Villa, Gerardo Romano, entre otros. Duración: 78 minutos.

XXX- TIROS A MANSALVA EN POLICIAL BIEN “ARGENTO”

Mariano Cattaneo encara “una de tiros” con sabor argentino, aunque sobrevuele algo del western hollywoodense y tarantinesco. Mérito notable es ese humor porteño que transforma el error fatal de tres matones de cuarta en una tragicomedia, para muchos un cine Clase B que se ve, a no dudarlo, como Clase A.

Al no cumplir con el objetivo que el jefe Roselli (Chucho Fernández) de la banda les dio, “Víctor” (Diego Cremonesi), “Juan” (Daniel Pacheco) y “Manuel” (Demián Salomón), intentan limpiar la escena, pero todo se complica por una vecina comedida (Mónica Villa) y el comisario de la zona (Gerardo Romano).

Droga, tiros a mansalva, extraño gurú con gran poder, transitan la narración que oscila entre la escatología sanguinolenta y el humor intrínseco virando, aun dentro del policial denso, a la comedia.

Mónica Villa deja huella aun en un rol pequeño pero sustancial, mientras que Gerardo Romano retoma la composición de un personaje duro e implacable, una característica de muchos de sus trabajos tanto en televisión como en cine. El resultado de esta producción de Mariano Cattaneo es bueno, potente, contando con una fotografía clara, limpia, para una historia que fluye en medio de tiros y situaciones pintorescas, lineal y efectiva.

Truculencias, buenos efectos técnicos, visiones, jalonan además esta propuesta policial “argenta” que resulta atractiva y simpática a la vez.

Elsa Bragato

BUITRES, LA CARA SALVAJE DEL CAPITALISMO

Documental de Mariano Mucci. Con Locución de Joe Goldman. Duración: 72 minutos. 

XXXX- ARGENTINA, “COBAYO” DE LOS BUITRES

Más que bienvenido resulta Mariano Mucci con el documental “Buitres, la cara salvaje del capitalismo”, marcando el camino que iniciara el recordado Pino Solanas hace varias décadas con “La hora de los hornos”. En “Buitres…” a través de Joe Goldman, periodista norteamericano radicado en el país hace 30 años y staff de ABC News, Mucci muestra el inicio y el recorrido de nuestro endeudamiento, así como la otra cara de la presidencia de Mauricio Macri, basada en la manipulación de medios con la ayuda del padre de los buitres, Paul Singer, además de explicar el surgimiento de éstos en los 80 de la mano de Ronald Reagan y Margaret Thatcher.

Joe Goldman, con su voz en off, entrevistó a Martín Guzmán, Axel Kicillof, Rafael Correa, Greg Palast y Adrián Paenza, entre otros. Pone en la picota a su propio país de origen por su justicia “republicana” con el ejemplo del ex juez Thomas Griesa, siempre a favor de los “buitres”, así como el insólito surgimiento de los paraísos financieros como “Delaware” a espaldas de los propios ciudadanos norteamericanos.

Nos redescubre el origen venal de la señal Bloomberg con el reportaje a Paul Singer, mientras el mismo Goldman participa de movilizaciones intentando captar la esencia de los reclamos populares y, al mismo tiempo, la indiferencia de los “Singer” del mundo para quienes no existen los otros sino ellos mismos.

Es un paseo traumático sobre los problemas financieros del país y las nefastas consecuencias en todos nosotros, aunque no menos necesario para saber con certeza de que hemos sigo elegidos como cobayos de múltiples experiencias de los ricos del mundo. Lamentable pero real.

Elsa Bragato

RECOMENDACIONES EN NETFLIX

YA NO ESTOY AQUÍ, de Fernando Frías de La Parra, México.

El realizador mexicano La Parra sigue la vida de Ulises, un joven adolescente de Monterrey, México, que vive en barrios carenciados. La zona se divide en bandas que se enfrentan a punta de pistola, que tienen un lenguaje localista inentendible y que se reúnen de noche para bailar cumbia “Kolombiana”, caracterizada por ser muy lenta, de caderas cadenciosas y pisadas fuertes. La huida de Ulises a New York le salva la vida. Pero no es fácil vivir en Brooklyn, menos aún desconociendo el idioma.

Hay varios planteos en la narración de La Parra: en primer lugar, realiza una pintura de cierta adolescencia de América Central donde los padres están ausentes. En este  cuadro, detallista por demás, La Parra muestra, no juzga, y plantea las desigualdades que anidan en el corazón de muchos de nuestros países. No se puede generalizar opinando que se trata de los jóvenes de América Latina porque, en verdad, desde esta parte del mundo nunca se pudo viajar en masa hacia los Estados Unidos. Pero sí desde algunos países de América Central y, en especial, de México. Es por eso que al norteamericano se le hace muy difícil entender que, más al Sur de la línea del Ecuador, estas bandas que asolan mayoritariamente a algunas sociedades son una minoría, producto de factores socioculturales de diferente raíz. A la Argentina, por ejemplo, casi ni el gaucho nos queda.

Elsa Bragato

NADIE SABE QUE ESTOY AQUÍ, de Gaspar Antillo, Chile.

Entre las producciones latinoamericanas que se encuentran en Netflix, sin duda esta producción chilena, surgida de los Larraín, es la que más nos llegó al corazón. La historia de Memo Garrido, un niño de maravillosa voz pero una obesidad que estallará en su adultez, y el robo de su identidad con consentimiento de su padre por razones económicas, atrapa y pone sobre el tapete la valoración de los talentos y el daño que los padres pueden hacer en la mente y el cuerpo de sus hijos al obligarlos a ser aquello para lo que no nacieron. No se puede contar mucho más de este film en el que la música y el respeto por el otro son sus pilares. Lo recomendamos fervientemente. El título es un gran acierto: nadie sabe quién es ese joven obseo que descuera ovejas. Agregamos que trabaja nuestro Gastón Pauls, muy ligado a la cinematografía de los Larraín, en un papel breve pero esencial.

Elsa Bragato

CANCIÓN SIN NOMBRE, De Melina León, Perú

Alguien dijo que este film en blanco y negro, con imágenes tratadas hacia el pastel, borrosas a veces, es imperfecto pero bello a la vez. Sin duda, Melina León lo consiguió. Toma el caso de Georgina Condori, música andina, cantora, cuya hija le es arrebatada inmediatamente luego del parto. El deambular de su pareja y ella, sacada de la camilla a poco de dar a luz, se transforma en un canto de dolor desgarrador a lo largo de los 93 minutos. Como en el caso de La Parra en “Ya no estoy aquí”, hay un disfrute en las escenas de bailes y danzas tribales o populares en exceso. Falta, por cierto, ese toque profesional que permite “airear” la narración audiovisual con tomas de diferente índole logrando en la síntesis el mejor relato. No obstante estas imperfecciones, hay mucha belleza de la mano de Melina LEón, que no atina a dar desarrollo a su Georgina, pero que la arropa con una estética en un blanco y negro misterioso. Muy interesante. Gran camino para León.

Elsa Bragato 

ADÚ, de Salvador Calvo, España. Nominada a 14 premios César. Con Luis Tosar y Moustapha Oumarou como Adú, dos pilares de esta historia. 

Salvador Calvo encaró tres historias que corren paralelas en envergadura para conformar una narración vibrante, compleja, envolvente, con una fotografía excelsa. Lo épico radica en los tres grupos protagónicos: el de los africanos que llegan hasta las vallas de contención de España, saltándoles y algunos muriendo en el intento por la represión; el caso del español encargado de una ONG que defiende a los elefantes –en vías de extinción- de los cazadores furtivos si bien no siempre lo logra (la escena es desgarradora), y el caso de una jovencita que es enviada junto a su hermanito menor, Adú, a París creyendo que todo está pago. Cada grupo humano enfrenta su propia epopeya,  con salvación, frustración, mentira, desilusiones, pérdidas irreparables, sentido de supervivencia. Se va hilvanando un perturbador entramado de hechos en los que los sentimientos tienen mucho que ver.

Fotografía, actuaciones, planteos narrativos, confluyen en la necesidad de llegar a España por diferentes motivos. Hay un peso pesado de la actuación como Luis Tosar en un rol diferente mientras que el pequeño Adú tiene una actuación soberbia con sus escasos años de edad, de ésas que hacen llorar al alma. A veces son minutos, otras son segundos. El arte es un toque. Y esta película de Calvo logra eso, toques de arte cinematográfico en varios rubros. Tal vez no en todos.

Elsa Bragato