JUEVES 18 DE JUNIO DEL 2015.-
Hay ocho estrenos que incluyen la galardonada “La Patota”. Destacamos
“La dama de oro”, de Simon Curtis, con Helen Mirren, quien interpreta a María
Altman, una mujer judía que huyó de Viena durante la Segunda Guerra Mundial y
regresa para recuperar el patrimonio de su familia, robado por los nazis. El
film es atractivo, tiene la misma
estructura de “Philomena” que tanto nos gustó con Judi Dench, siendo un retrato
de época interesante. Además de estrenan “Yarará, la película” con Juan
Palomino, y “Belgrano” sobre el club Belgrano de Talleres de Córdoba.
LA PATOTA
De Santiago Mitre. Con Dolores Fonzi, Oscar Martínez, Esteban Lamothe,
Verónica Llinás, entre otros. Música de Nicolás Varchvsky. Duración: 103
minutos. Coproducción Argentina- Brasil y Francia.
BUENA. RENOVADA VISIÓN DE UN CLÁSICO NACIONAL
Luego de más de cinco décadas, llegamos a esta adaptación libre de “La
patota”, gran film de Daniel Tinayre con Mirtha Legrand en el protagónico,
realizada por Santiago Mitre, el mismo director de la aclamada “El Estudiante”.
La película llegó al festival de Cannes donde recibió el Gran Premio de la Semana
de la Crítica, tras un aplauso de pie de la platea.
Está sustentada en la actuación de Dolores Fonzi como “Paulina”, una
promisoria abogada que regresa a Misiones para desarrollar un proyecto de
inclusión, de educación popular, en una zona fronteriza con el Paraguay y
Brasil. La secunda ese notable actor que es Oscar Martínez y que, en cada
performance, demuestra su enorme talento. Compone a un padre que se opone a la
elección de su hija, porque no está de acuerdo con que la joven abandone el
bienestar porteño para vivir en un lugar con precariedad y alejado de Buenos
Aires. Juez, con pasado militante en los 70, su fuerte temperamento ha marcado
el carácter de Paulina que está convencida de su lucha, como su padre lo estuvo
en su época. Nada importa, ni siquiera su novio paraguayo, a cargo del más que
ascendente Esteban Lamothe (desde “El cerrajero”, es el actor que más se ve en el
cine nacional). “Paulina” desafía al destino y, ya ubicada en el paraje, es
violada brutalmente a poco de llegar por una patota. Sobreviene un embarazo y
no desea reconocer al violador, padre de su hijo.
Señalamos que Santiago Mitre tomó la película de Tinayre como punto de
partida y algunos lugares característicos del film inicial a manera de
homenaje, sin que esto incidiera en su propia concepción de la historia.
Hay un debe y un haber: ciertas escenas están cortadas abruptamente,
incidiendo negativamente en la narración, si bien el objetivo pudo ser el
opuesto así como la música incidental está ausente y, en muchos casos, se hacía
necesaria como elemento aglutinador de la propuesta. Frente a este “debe” hay
una serie de virtudes: la actuación de Dolores Fonzi, probada en muchos films
de diversa índole, es dúctil, precisa, convincente. Tiene hasta una impronta
europea en su personaje por la apetencia artística del director, en detrimento
de la fortaleza sanguínea de muchos films hollywoodenses. La cámara en mano
ayuda a la agilización requerida en muchas secuencias. Y surge definitivamente
la película de actores más que de un relato aunque, en el caso de Lamothe, pudo
tener más presencia.
Estamos frente a un film nacional de buena factura, con un mensaje
perturbador que va más allá de lo meramente explícito, potente de una u otra
manera, y con una actualidad que nos golpea. El blanco y negro de Tinayre es la
“memoria presente”, se la extraña un poco, pero sin desmérito para la dupla
Fonzi-Mitre que puede regalarnos más películas de excelencia creciente.
Carlos Pierre
BAJO EL MISMO CIELO
De Cameron Crowe. Con Bradley Cooper, Emma Stone, Rachel McAdams, Bill
Murray, Alec Baldwin, entre otros. Música de Jonsi & Alex. Duración: 105
minutos.
REGULAR. PREVISIBLE PASEO DE FAMOSOS
Hawaii es un destino permanente para los norteamericanos. Sus bases
militares, sus playas, su famoso “Aloha” (título original que significa
“Hola!!!!” en el idioma nativo), son distintivos de un lugar paradisíaco en el
medio del Pacífico. Un militar que viene de las guerras de Oriente, personaje
de Bradley Cooper, con serias secuelas físicas, es destinado a esta isla
paradisíaca donde se encontrará con personajes raros como el de Bill Murray,
otros camaradas un tanto “pesados” como el rol de Alec Baldwin (hace honor a su
mal carácter real) y una novia que lo abandonó y una chica que, desde el vamos,
lo mira con algo más que cariño.
La historia no tiene mucho ton ni son. Tampoco se entiende qué hace
Bradley Cooper que prácticamente no actúa sino que aparece apoyándose en el
marco de una puerta, mira, tiene flashbacks “inducidos”, es decir, no actúa. Se
pasea por los sets. Su historia de amor es tan fallida y remanida que no se
puede creer que se haya apelado a un elenco de estrellas, algunas ganadoras de
Oscars, para este bodrio con todas las letras. Ni se moleste. Espérela en el
cable para una tarde lluviosa.
Elsa Bragato
LA NOCHE DEL DEMONIO 3
De Leigh Wannell. Con Lyn Shaye,
Stefanie Scott, Dermot Mulroney, entre otros. Producción de James
Wan, entre otros. Música de La Miru. Duración: 97 minutos.
REGULAR. TERROR
BARATITO
James Wan es uno de los
productores ejecutivos de esta baratita película de terror que recurre, a
manera de precuela, a recursos remanidos y sustos varios que impactan, esto sí
hay que reconocerle. No se entiende, sin embargo, como James Wan que generó ese
notable éxito “El conjuro” pudo atreverse a esta película. Y hay que decirlo
con todas las letras: un engendro.
Una joven recurre a la
parapsiquica Elise Rainier (Lyn Shaye) para reencontrarse con el espíritu de su
madre, fallecida. A regañadientes, todos entendemos que Elise complacerá a la
joven y entonces ingresaremos todos a una serie de chillidos y gritos y sustos
como si fuese el “tren fantasma”. No mucho más. Un espíritu trae a otro,
“Elise” cae en trance, la joven pedigüeña sufre un “vaciamiento de espíritu”, y
ambas empiezan a recorrer una casa “virtual” donde los espectros aparecen con
máscaras tan burdas que, en medio de algún sobresalto, dan risa. O no alcanzó el
presupuesto o se pensó que poniendo máscaras sin ojos el espectador iba a tener
una sensación de “realismo mágico” perturbador. En realidad, ocurre todo lo
contrario. Uno queda preguntándose qué les pasó, si no les alcanzó el
presupuesto o qué o encontraron a los técnicos de efectos especiales de huelga.
O en día de descanso. Los fanáticos del género tendrán su cuota pero estamos
seguros de que esta película no podrá dejarlos satisfechos.
Elsa Bragato
INTENSA-MENTE
De Peter Docter y
Ronaldo Del Carmen. Música de Michael Giacchino. Duración: 94 minutos.
EXCELENTE. UNA MIRADA
INTERIOR SUBYUGANTE
La propuesta del guión
es diferente y apunta a una pregunta del alma: ¿acaso hemos mirado alguna vez
qué pasa por la mente del otro? Esta metafísica pura es llevada a la animación
con tal maestría que no podemos dejar de maravillarnos por sus creadores, Peter
Docter y el productor Jonas Rivera, a quienes conocimos el 18 de abril en una
estupenda e inteligente conferencia de prensa (muy fuera de lo común). Fueron
los generadores de “Up, una aventura de altura”, una animación que nos conmovió
con un abuelo que decide revivir luego de perder a su compañera. ¿Podía tener
éxito el tema entre los más chicos? Sí, fue un film supertaquillero porque la
emoción llega siempre al corazón de todos, de una u otra manera.
Con base en el Cuartel
General, centro de control dentro de la mente de Riley, una niña de 11 años,
cinco emociones tienen mucho trabajo! Ellas están lideradas por la Alegría (voz
de Amy Poehler), “voz cantante” en el cerebro de la pequeña Riley. “Temor”
representa la inseguridad y su trabajo es mantener a salvo a la niña, mientras
que “Furia” trata de asegurarse de que las cosas sean justas y “Desagraado” es
muy obstinado y honesto, evitando que la protagonista se intoxique tanto física
como socialmente. Finalmente, “Tristeza” no tiene mucha acción aunque exista
(lo cual es más que loable!).
La aventura está en el
papel de las emociones en el cerebro, el corazón es harina de otro costal. Hay
tantos elementos sutiles y maravillosos dentro de esta aventura de
Disney-Pixar, como un amigo imaginario con trompa de elefante, cola de gato y
ademanes de delfín, así como el sistema de “Bolas-recuerdo” que hace funcionar
la vida emocional de la protagonista. Es un fantástico mundo de rieles,
engranajes y tubos al servicio de ese “sistema”. Podríamos seguir detallando
secuencias pero, en realidad, a esta animación hay que verla y disfrutarla con
el alma, el cerebro y el corazón. Es una verdadera proeza visual, vuela alto y
profundo, intensamente no solo en el cerebro de “Riley” sino en el todos
nosotros. Y no es un film solo para chicos de cierta edad sino también para los
adultos, porque el relato nos lleva a un mundo imaginario que conocemos pero
que no todos podemos imaginar como sus creadores. Aquí hay excelencia no solo
técnica sino creativa, inteligencia pura al servicio del entretenimiento. No se
la pierda!!!
Carlos Pierre