JUEVES 9 DE ABRIL DEL 2015.-
Seis estrenos “ligeritos” para enfrentar el batacazo de “Rápidos y
furiosos 7” que en pocos días llegó al millón de espectadores, acaparando más
de un centenar de salas ante la respuesta del público. “El desierto”, de
Christophe Behl, alemán radicado en nuestro país, intenta un thriller con
zombies “a la argentina”. Por otra parte, resulta auspicioso el film del
misionero Juanma Brignole, opera prima titulada “Mis sucios tres tonos”,
documentando en términos de ficción el viaje de un grupo de amigos para ver la
actuación de Fun People en los 90. Pequeña historia, con buen manejo
fotográfico. Para iniciarse en el largometraje, está bien. Dirigido al público
joven.
LA BELLA Y LA BESTIA
De Christopher Gans. Con Vincent Cassel, Lea Seydoux, entre otros.
Duración: 112 minutos.
BUENA. SOMBRÍA PERO MÁGICA
La tradicional historia publicada por primera vez en 1756 ha tenido
numerosas versiones orales y escritas, e incluso en el cine desde la década del
40. La gran historia, contada por Disney, surgió en 1991, con canciones
inolvidables. Este éxito motivó la realización de una versión teatral en 1999
en España y, en el 2003, el teatro inglés hizo lo propio.
Dentro de la tendencia actual de llevar los tradicionales cuentos a
versiones con actores de carne y hueso surge este film de Christopher Gans, con
la actuación de Vincent Cassel y Lea Seydoux, quien fuera conocida en nuestro
país por “La vida de Adele, película controvertida con premios en su haber.
Bien fotografiada, destacando ese concepto “de la animalidad en el ser humano”,
propio de la historia, la película agrada, encanta, nos sumerge en un cuento
que, si no es de hadas, por lo menos se le parece mucho.
Hay romanticismo, hay magia, efectos especiales sin exageración y una
caracterización de la Bestia (Vincent Cassel) adecuada, que no muestra
“hilachas” en su transformación. A pesar, y esto hay que decirlo, de que se
trata de una versión más “adulta y sombría”.
En el caso de este tipo de género, cuentos infantiles (o no tanto)
llevados al cine con actores de verdad, valen el esfuerzo de producción, el
diseño de arte, la fotografía, y la pareja protagónica. De cumplirse estos
objetivos, el film debe ser disfrutado por el público. En este caso, con
tendencia a público más adulto.
Elsa Bragato
EL PICASSO DE PERSIA
Guión, fotografía y dirección de Mitra Farahani. Duración: 96 minutos.
Documental ganador del BAFICI 2014.
MUY BUENA. RESCATE DE UN NOTABLE ARTISTA
La directora iraní Mitra Farahani, radicada en París, es una de las
más destacadas realizadoras de su país, encarcelada, liberada y enfrentada, de
alguna manera, al gobierno de Irán por bucear en el pasado del país en diversos
aspectos trayendo, como es el caso de este film, a figuras “malditas”. Babman
Mohasses fue un notable artista plástico iraní, fallecido en el 2010 en Roma,
donde se lo encuentra. Durante años se consideró que su obra había sido
destruida por el artista, hasta que la búsqueda de Farahani permitió recuperar
su figura y su arte.
El documental es un paseo por la vida de este malhumorado y seductor
artista, olvidado por su país, condenado por haber pertenecido ideológicamente
al régimen anterior al imperante. El desfile de sus obras, de diversos períodos
bien retratados por Farahani, permite descubrir a un fantástico pintor con
puntos en común con Picasso y hasta con Dalí, perfeccionista a ultranza, con toques
de Botero en sus figuras. El film es atrapante por su realización y por la
figura en la que se sustenta el documental, la búsqueda, el hallazgo y su arte.
Un documental precioso.
Elsa Bragato
EN TUS ZAPATOS
De Thomas McCarthy. Con Adam Sandler, Dustin Hoffman, Steve Buscemi,
Lyan Cohen, entre otros. Música de John Debney y Nick Urata. Duración: 99
minutos.
BUENA. “SALVANDO” A SANDLER
Una cuarta generación de zapateros remendones (The Cobbler, título en
inglés del film) tiene en Adam Sandler a un curioso protagonista, ganador de
los Razzie Awards casi sin pausa, considerado un actor sin mayores
posibilidades que el humor escatológico junto a sus amigotes en exóticas
playas, con algunas chispas interesantes en films como “Click, perdiendo el
control” o “Spanglish”. En el caso de “En tus zapatos” logra una performance
diferente, al ponerse en la piel, y en “los zapatos”, de Max Simkin, al cuidado
de su anciana madre y del valor del negocio que tiene. Allí hay una máquina
para coser los zapatos rotos que le permitirá vivir “la vida de otros” por
aquello de que, a veces, hay que “ponerse en los zapatos de los demás”. Con
variaciones sobre el significado social de esta frase, Max va viviendo
circunstancias diferentes, charlando con su vecino (el gran Steve Buscemi) o la
“presencia” de su padre (la sorpresa de Dustin Hoffman). Entre lo mágico y lo
real, Adam Sandler logra una buena actuación, alejada de sus tics cómicos que
suelen saturar. Desde este punto de vista, el film no es para rechazar. Tan
solo es una historia más con variantes en sus protagonistas conocidos por otros
personajes que no lograron convencer. En este caso, Adam Sandler intenta hacer
los deberes. Y no está mal.
Elsa Bragato
EL VIAJE MÁS LARGO
De George Tillman JR. Basado en una novela de Nicholas Park. Con Scott Eastwood, Britt Robertson, Oona
Chaplin, Jack Huston, Alan Alda, entre otros. Música de Mark Isham.
Duración: 128 minutos.
BUENA. DOS A QUERERSE
Nicholas Park es el
nuevo Corín Tellado del siglo XXI y uno de los autores más llevados al cine por
su edulcorado romanticismo y sus historias de amores controvertidos, aunque
siguiendo parámetros muy lineales de los que no escapa el guión de esta
película que cabalga entre la calificación “regular” y “buena”. Depende del
ánimo del espectador. La novedad está en cómo se gana la vida “Luke” (Scott
Eastwood, uno de los 8 hijos de Clint Eastwood): es un “domador” de toros, en
sesiones que deben superar los 8 segundos sobre furibundos animales a los que
se acicatea para que sean más fieros aún. Gana dinero para mantener la casa
materna, donde lo espera una madre viuda y esperanzada en que su hijo cambie de
rumbo.
Aquí no falta nada: los
golpes bajos están porque, si no, no sería una historia de amor. “Luke” ha
sufrido una fuerte lesión en la cabeza por sus domas (flashback lo muestran).
El encuentro con “Sophia” (Britt Robertson), con sonrisas forzadas -típicas de
los comerciales- entre ambos jóvenes, tiene matices dramáticos que los llevan a
conocer al anciano a “Ira” (Alan Alda) quien cuenta la historia que tuvo con
“Ruth” (Oona Chaplin, hija de Geraldine Chaplin, nieta de Charles Chaplin). Traído
de los pelos, se meten en esa historia para la que el director apela a la
Segunda Guerra Mundial, las consecuencias físicas que padece “Ira” por salvar a
un compañero y la fuerza del amor de ambos para superar la tragedia familiar.
Solo por un artilugio bastante sofisticado y sin conexión, las dos historias se
unen y el final es más que previsible. Varias veces ingresaremos junto con los
protagonistas a hospitales, corridas de emergencia, en medio de secuencias que
dejan un “dejá vu” importante.
Hay una buena
fotografía, las domas de toros (que no son tales sino “durar” sobre el animal
mientras corcovea enloquecidamente) con “close up” de animales y domadores,
apaciguan el dulzor exagerado. Es imposible creerle al lindo de Scott Eastwood,
muy inexpresivo, así como Britt Robertson es una bellísima chica que puede
tener un mejor destino en películas más comprometidas. Aquí los dos conforman
una parejita exquisita por la belleza de ambos pero todavía les falta bastante
para hacerse creíbles desde la actuación. Destacamos a Alan Alda, Oona
Chaplin, y a Jack Huston, el “joven Ira”
que no tiene un pelo de parecido a “Ira” o Alan Alda, joven o anciano.
Nadie sale disgustado
del cine pero, en verdad, fue una sesión de amor adolescente, con algunas
escenas de erotismo bien llevadas, que solo dejan una sonrisa. No está tan mal.
Elsa Bragato