JUEVES 13
DE ABRIL DEL 2017.-
Varios
estrenos entre los que hay diversas propuestas nacionales: “Amor de ultratumba” es un film de terror de Ernesto
Aguilar. Un joven se enamora de una bella muchacha descubriendo que tiene un
altar con las fotos de sus ex. ¿Tendrá él el mismo fin= El amor puede más. Le
sigue “Mi último fracaso”, documental
de la joven coreana Cecilia Kang que presentó en el BAFICI 2016. En este caso,
analiza su integración a una cultura muy diferente, la relación con sus nuevas
amigas, y cómo tantas diferentes vivencias se van sumando en su espíritu y su
mente. También está “Bienaventurados
los mansos”, de Patricio Escobar, documental que informa sobre la
relación entre la Iglesia Católica nacional y el Estado, basada en
reglamentaciones surgidas durante la última dictadura militar. La francesa “Todo para ser felices” de Cyril
Gelblat, nos ofrece una tierna y dura mirada sobre un joven recién separado que
debe hacerse cargo de sus dos hijos pequeños. Nunca antes se había preocupado
por esta relación padre-hijo, dejando al cuidado de su esposa el hogar y los
críos. Sin ser la mejor película sobre un tema bastante transitado, resulta una
comedia ágil, llevadera y costumbrista.
RÁPIDOS Y
FURIOSOS 8
De F.
Gary Gray. Con Vin Diesel, Dwayne Johnson, Jason Statham, Charlize Theron, Kurt
Russell, Elsa Pataky, entre otros. Música de
Brian Tyler. Fotografía de Stephen F. Windon. Duración: 136 minutos.
XXXXX- ENTRE EL CRIMEN Y EL BIEN
Y sí. Es
imposible no repetir los clishés de las siete películas anteriores, las
persecuciones, los tiros, la búsqueda de un sospechoso de todo mal y que Vin
Diesel y “La Roca” Johnson, junto al más que efectivo Jason Statham, no
demuestren que tienen músculos además de sentimientos.
La ausencia
de Paul Walker desde la película número 7 transformó la vida de este grupo que,
por momentos, tiene calma y vida normal y. en otros, desata su furia criminal.
Entre el bien y el mal los muchachos demuestran que conocen bien el oficio y
que tienen un entrenamiento muy eficiente a pesar de que muchos vienen
“corriendo” y saltando desde hace varios años en sus películas.
En este
caso, se agrega la bella Charlize Theron como esa mujer fatal que enamora a un
tranquilo Vin Diesel, llevándolo por un camino nada deseable para el grupo. La
calma se quiebra y tendremos una recorrida por New York, Cuba, el océano Artico,
bellezas naturales diferentes, que aportan energía a una narración previsible.
Theron está absolutamente desaprovechada mientras que Vin Diesel, ante la
ausencia eterna ya de Paul Walker, cobra un protagonismo excesivo que desnivela
la narración con escenas que pudieron dejarse de lado. Su traición a la familia
es la causa de este desbarajuste de acciones y contraacciones.
En cuanto
a efectos especiales, nada hay que decir. Están todos, y el film se transforma
en un entretenimiento adrenalínico que no tiene más objetivo que el planteado.
Ningún subtema que nos haga pensar, ni entretelones que nos hagan suspirar.
Romance hay, como también la furia muscular de los máximos exponentes que
protagonizan esta saga, dirigida por primera vez por F. Gary Gray, anunciándose
ya tres películas más. Recién en el Rápido y Furioso 10 se terminará la
historia que, en cada film, renace con un espíritu que no puede dejar de ser
siempre el mismo. Pero espíritu tiene…
No hay
mucho más para analizar, es una película para descargar las furias semanales
comiendo pochoclos en una sala bien acondicionada. Divierte, no presume de
intelectualidad alguna y se compromete menos con los postulados de los primeros
cinco films. En esto está su mayor pecado.
Elsa
Bragato
UN JEFE
EN PAÑALES
De Tom
McGrath. Música de Hans Zimmer y Steve Mazzaro. Animación en 3-D. Duración: 97
minutos. DreamWorks Animation Films.
XXXXX-UN BEBÉ MUY COMPLICADO
En
verdad, “Un jefe en pañales” tiene una buena idea pero se mete en berenjenales
que hace dudar si esta animación es realmente para los niños o bien puede estar
dirigida a un público preadolescente.
Un bebé
que nace en la “Baby Corp” se muestra diferente a los demás y es enviado a la
gerencia de esta “corporación virtual” a la que se accede chupando fuertemente
un chupete, desde donde es enviado a una familia que sueña con otro hijo. En
ese hogar vive Tim, de 7 años, que no puede creer no ser ya el centro del amor
de sus padres. Vestido de traje y corbata, este bebé tiene voz de hombre y
organiza reuniones con otros bebés de padres amigos de la familia donde se
instaló para impedir que surja un nuevo perrito en Las Vegas dado que estos
animalitos están desplazando a los bebés en el amor de los padres.
La
complejidad narrativa surge a la hora cuando los personajes deben viajar a Las
Vegas. De la pelea entre dos hermanos por conquistar el amor de los padres
pasamos a un policial exagerado y hasta cruel: el jefe del evento encierra a
los padres de Tim con voluntad de matarlos. Demasiado para los chicos! Así como
resulta dificultoso comprender que ese anciano empresario fue alguna vez un
bebé de la “baby corp”. Aquí el mensaje es nefasto: ojo con los ancianos.
Es decir,
la animación tiene muchos condimentos a favor: al comienzo es un buen relato de
cómo los padres deben demostrar su afecto por igual a los hijos que tienen, y
cómo los hermanos deben tratar de superar los celos que un nuevo integrante
familiar les produce. Luego pasamos a un policial vertiginoso que cae en
situaciones demasiado complejas. Es “hasta ahí” recomendable, aunque la
realización sea excelente. La música de Hans Zimmer es sencillamente una obra
maestra de orquestación mientras quel a canción “Lo que el mundo necesita es
amor” fue escrita hace 50 años por el compositor Burt Bacharach y, entre una de
sus difusoras, estuvo Dionne Worwick.
Elsa
Bragato
EL PORVENIR
Dirección y guion de
Mia Hansen-Love. Con Isabelle Huppert, André Marcon, Roman Kolinka, Edith Scob,
Sarah Le Picard, entre otros. Duración 102 minutos. Coproducciòn de Francia-Alemania.
Hablado en francés, alemán e inglés.
XXXXX- BUSCANDO LA VIDA PROPIA
El quinto film de la
realizadora francesa Mia Hansen-Love tiene ese fuerte acento galo que hace gala
de diálogos abundantes, precisos e intelectuales. En este caso, enriquece el
texto con citas de Pascal, Rousseaux, Schopenhauer, entre otros filósofos,
literatos y políticos. No es ocioso sino que responde a la profesión del
matrimonio protagonista: son profesores de filosofía.
La inmensa actriz
Isabelle Huppert protagoniza a Nathalie, en un rol diferente a los que hemos
visto en los últimos tiempos. Carga con el peso de todo el film, componiendo a
una esposa que enfrenta la adversidad de quedarse sola y nunca supo qué era la
libertad de la elección cotidiana. Para eso estaba su marido, Henz (André
Marcon), quien la abandona por una joven sin mayores vueltas. En el medio,
están los dos hijos.
El film plantea con
gran adultez la conmoción interior de Nathalie, que enfrenta un mundo
desconocido: es ella ahora quien decide qué debe hacer, cómo enfrentar
diferentes adversidades profesionales y personales. Incluso el cuidado de su
madre. En la mitad de su vida surge la zozobra, con el paliativo de un joven
alumno que pondera su actividad profesional. No hay romances sino esa suerte de
dulce compensación que da la vida ante el amargor de circunstancias
inesperadas. Esta Huppert está muy lejos de “Elle”, de reciente estreno, donde
interpretó a una inescrupulosa mujer. Nathalie es un desafío actoral para la
gran actriz. Contenida, sufrida, sin explosiones melodramáticas, el
desmoronamiento interior le da fuerzas para reconstruir la vida cuando no hay
otra chance que ésa. Y ese joven alumno, Fabien, le tiende la mano salvadora
incluyéndola en una comunidad donde Nathalie aprenderá a convivir consigo
misma. Sin estridencias, arma su propio camino de vida, enriquecida por la
llegada de nietos y de una paz interior.
La historia es
fantásticamente humana, nos plantea la necesidad de la existencia propia sin
muletos, la elección del día a día con o sin amor, la existencia de uno mismo
sin subterfugios. El guion se encarga de que cada secuencia sea un escalón más
hacia el objetivo de la protagonista, sin altibajos, con perseverancia. Estos
sentimientos afloran en el distante rostro de Isabelle Huppert que, sin
embargo, dota a su Nathalie de enorme fuerza interior. No en vano, la película
y su actuación han sido premiadas en varios festivales del año pasado.
Carlos Pierre
EL FARO DE LAS ORCAS
De Gerardo Olivares.
Con Joaquín Furriel, Maribel Verdú, Quinchu Rapalini, entre otros. Música de
Pascal Gaigne. Duración: 110 minutos. Argentina-España.
XXXXX- LECCIÓN DE VIDA
El realizador Gerardo
Olivares recorrió el mundo rodando documentales, antes de filmar ficciones
exitosas. Entre los productores de esta película está Luis Puenzo quien, cuando
preparaba el rodaje de “La puta y la ballena”, conoció a Roberto Bubas,
guardafauna de Punta Norte. Así se enteró de la historia real de una mujer que lo visitó con su hijo que sufría el síndrome
de Asperger (autismo). El pequeño se sentía atraído por las orcas del Atlántico
Sur, viendo documentales en la televisión. Su mamá pensó que, tal vez, era
positivo traerlo hasta estas tierras para mejorar su situación y hasta
encontrar el milagro de su sanación. Roberto Bubas, que convivió 10 años con
las orcas, retrató el caso que le tocó en suerte vivir en el libro “Agustín
corazón abierto”, que ya es una leyenda internacional.
“El Faro de las Orcas” está inspirado en
hechos ocurridos en Península Valdés, provincia de Chubut, y nadie mejor que el
realizador Gerardo Olivares, vasto documentalista, para dirigir este film
protagonizado por Joaquín Furriel como el guardafauna Beto, la española Maribel
Verdú como la madre, y Quinchu Rapalini, el pequeño con autismo. Nunca mejor
trío protagónico.
Joaquín Furriel ofrece
otra fantástica actuación, opuesta a otros roles cinematográficos y
televisivos, como ese guardafauna que cabalga a puro pelo su hermoso caballo
blanco, y vive intensamente el caso de Agustín, ayudándolo con su experiencia
con las orcas. De la misma manera hay que calificar a Maribel Verdú y detenernos en Quinchu Rapalini, quien
encarna a “Tristán”, realmente una joya de actuación más que prometedora.
Emocionante performance.
Sin lugar a dudas, esta
biopic es diferente, enmarcada en el paisaje panorámico de Chubut, el profundo
horizonte del verde Atlántico y esas personas no humanas monumentales que son
las orcas, a mitad de camino entre los delfines y las ballenas. Ennoblece al
cine nacional tanto el tema como el respeto a la fauna de nuestro territorio,
deja el mensaje de la curación posible, factible, con la ayuda de seres que no
hablan pero que sienten, y remarca el respeto por el otro, pequeño o adulto,
habitante del mar o de la tierra. La
empatía es inmediata: el espectador siente que la historia en sí, y esta
narración que nos la cuenta, tocan el corazón de forma inmediata. Como frutilla
del postre está la música incidental que interpretó la Orquesta Sinfónica de
Bratislava, elegida por el director Olivares. Aciertos en el elenco, en la
forma de encarar la fotografía, en la historia en sí. No se la pierda.
Carlos Pierre