JUEVES 26 DE MAYO DEL 2016.-
Estrenos de diverso género llegan a las
salas de cine del país. Entre ellas está el excelente documental “Contra
Paraguay” de Federico Sosa que, con testimonios actuales y algún material de la
época, reconstruye la feroz guerra de la Triple Alianza (tuvo otros nombres
también) que Argentina, Brasil y Uruguay iniciaron contra el Paraguay entre 1864
y 1870. El elemento “oscuro” del que no hay pruebas pero existe como un rumor
con muchas bases es la intromisión de Gran Bretaña para alcanzar la zona del
Chaco bajo los límites de la nación hermana para su usufructo (recordemos a
Horacio Guarany, de 91 años, cuyo padre era hachero de las empresas británicas,
explotadoras del Chaco, generándose otra guerra entre Bolivia y Paraguay: la
guerra del Chaco Boreal entre 1932 y 1935). Más que recomendable.
También llega “Just Jim”, del joven actor
británico Craig Roberts, ganador de premios como revelación de su país, donde
plantea los problemas de un adolescente que es un perdedor. Su vida cambia
cuando llega “Dean” (Emile Hirsch), un norteamericano que habita la casa
vecina. Interesante para los más jóvenes.
ALGUNAS CHICAS
Guión y dirección de Santiago Palavecino.
Con Cecilia Rainero, Agostina Lçopez, Agustina Muñoz, entre otros. Música de
Agustina Crespo. Duración: 109 minutos.
REGULAR. MUJERES EN PROBLEMAS
Intentar conocer los resortes profundos de
las mentes femeninas desde un punto de vista masculino no da buenos resultados.
“Algunas chicas” puede comprenderse con dificultad desde lo elemental: la mujer
que se va al campo donde están sus amigas (“Celina”, cirujana) para superar una
crisis conyugal. El mundo femenino entra, entonces, para Palavecino en un túnel
oscuro por momentos donde el lesbianismo y la droga son paliativos importantes.
Al menos, es lo que se ve, lo que llega, lo que confunde también al espectador
dado el clima onírico que campea en el film. Las opiniones están divididas. En
este caso, el film no convenció, sin que esta opinión melle el talento de
Santiago Palavecino por su anterior film “Otra vuelta” y “La vida nueva”.
Añadimos que está basada en “Entre mujeres solas”, de Cesare Pavese, uno de los
más famosos autores no convencionales de la narrativa italiana del siglo XX.
Carlos Pierre
FRANCOFONÍA
Guión y dirección de Alexander Sokurov. Con
Louis-Do de Lencquesaing, Vincent Nemeth, Benjamín Utzerath. Música
de Murat Kabardokov. Duración: 87 minutos,
MUY BUENO. CLAMOR POR EL LEGADO CULTURAL
Alexander Sokurov nos regaló hace 13 años
el fantástico documental de una supuesta toma-secuencia única filmado en el
Hermitage de San Petesburgo, “El arca rusa”, uno de los museos más
impresionantes del mundo. En este caso, busca la relación del poder con el arte
partiendo de la ocupación nazi a París en 1940. El director del Louvre era
entonces Jacques Jaujard y debió enfrentar al conde nazi Franz. W. Metternich.
Los inmensos cuadros, estatuas, fragmentos
de la antigüedad que guarda el Louvre, fueron codiciados por la sinrazón nazi
que saqueó los museos de los países ocupados para deleite de los jerarcas
alemanes. Hitler apetecía las obras maestras atesoradas en el Louvre. Sin
embargo, como ocurrió en algunas otras ciudades europeas, los franceses
pusieron a resguardo sus tesoros artísticos. Curiosamente el conde Metternich
se erigió como "curador“ del museo secundado por su director, Jaujard.
Ambos lo protegieron al mismo tiempo que el ejército alemán arrasaba con la
bella París. Salas vacías fue la recepción a los nazis.
Alexander Sokurov no se va del género
documental pero aporta su genio a través de recreación de la época, generando
un docu-ficción por momentos. Apela a diversos lenguajes audiovisuales que
transforman su documental en una experiencia enriquecedora. Como curiosidad, se
puede ver el embalaje especial para ocultar la gigante Victoria Alada de
Samotracia, del siglo II A.C, que recibe a los visitantes actuales en la gran
escalinata central del museo. Leonardo Da Vinci fue otro de los protegidos: el
óleo “San Juan Bautista”, entre varias obras más, fue ocultada de la mano negra
nazi.
Mientras las imágenes de “El arca rusa”
subyacen en la memoria del espectador, se suman las nuevas y potentes del
Louvre, filmado esencialmente en blanco y negro dándole un clima melancólico,
triste, una verdadera resistencia a la sangrienta ocupación hitleriana.
Por la calidad del genio creativo de
Alexander Sokurov, la crítica se torna injusta. Es imposible retratar con
palabras el significado de este documental, más un grito de libertad que un
muestrario de obras de arte. Sokurov, de exquisita sensibilidad y profunda
filosofía artística, lanza un clamor subyacente por las reliquias destruidas
hoy en Medio Oriente. Ni aún en medio de la muerte feroz de la Segunda Guerra
Mundial se osó destruir el patrimonio artístico. Imperdible.
Carlos Pierre
MENTE IMPLACABLE
De Ariel Vromen. Con Ryan Reynolds, Kevin
Costner, Gary Oldman, Tommy Lee Jones, entre otros. Música de Keith Power y
Brian Tyler. Duración: 113 minutos.
BUENA. INTENSO POLICIAL
Con el ritmo intenso de un policial actual,
pero filmado con narración clásica, llega “Mente Implacable” que devuelve a
Kevin Costner en un gran papel, lejos del galán. La CIA pierde a uno de sus
hombres (Ryan Reynolds) en un violento tiroteo, quien deja a una mujer e hijo y,
en sombras, un maletín con miles de dólares mientras un “holandés asesino”
queda libre. En medio de esta complejidad argumental, la CIA decide contratar a
un valioso neurocirujano (Tommy Lee Jones) para que intente transvasar los
conocimientos contenidos en el cerebro del agente muerto a la mente de
“alguien”. Hay que conseguir a ese “alguien”: es un convicto, una suerte de
“Hannibal Leckter” que encarna Kevin Costner como “Jerico”.
Las secuencias de la operación que involucra
a los dos cerebros, el del muerto y el de “Jerico”, son impactantes. Nada es
inmediato y de esto se trata esta película que transcurre con mucha adrenalina
de principio a fin, no hay descanso, entre la persecución de la CIA al “nuevo
agente” y las confusiones que éste padece entre sus propios recuerdos y los que
afloran por la “inyección” de la mente del agente muerto.
Vale agregar que el director Ariel Vromen,
de origen israelí, conmovió en Cannes en 2012 con “Iceman”, basada en la
historia del asesino serial Richard Kuklinski, sicario de la mafia
norteamericana. Hay especialización en el tratamiento de mentes criminales
apoyado en grandes protagonistas y en la tecnología de la que hoy se dispone.
Es decir, Vromen no es nuevo en el género.
En rigor de verdad, la película atrae.
Kevin Costner regresa con un papel a su medida, los clishés del guión y la
complejidad de este paso científico aún experimental (varios films trataron el
tema) no hacen mella en el interés del espectador. En todo caso, las
actuaciones sostienen cualquier debilidad de la narración, desde Gary Goldman
hasta el propio Costner. La historia de amor que se muestra en sugerentes
secuencias entre la viuda del agente y “Jerico” es lo más flojo o difícilmente
creíble. Para entretenerse con tiros y un Kevin Costner atrapante.
Elsa Bragato
ALICIA A TRAVÉS DEL ESPEJO
(Y LO QUE ALICIA ENCONTRÓ ALLÍ)
De James Bobin, sobre la novela de fantasía
de Lewis Carroll en 1871. Con Mia Wasikowska, Johnny Depp, Helena Bonham Carter
, Anne Hathaway, Sacha Baron Cohen, entre otros. Música de Danny Elfman.
Duración: 113 minutos.
MUY BUENA. MÁS VERBORRAGIA VISUAL QUE
CUENTO
James Bobin dirigió esta secuela de “Alicia
en el país de las maravillas”, escrita por Lewis Carroll en el siglo XIX como
segunda parte del cuento original. El film anterior tuvo a Tim Burton como
director y a su actor icónico, Johnny Depp, quien también compone al
“Sombrerero loco” en esta película.
“Alicia” (Mia Wasikowska) regresa de un
tormentoso viaje marítimo como capitana de la embarcación “Maravilla”. Asiste a
la recepción de Lord Ascott y se conmueve profundamente al enterarse de que la
familia del sombrerero loco Tarrant Hightopp (Johnny Depp) falleció en un
incendio. Será “Ábsolem”, ahora una mariposa azul, quien la guíe hasta el
espejo mágico al que deberá traspasar no sin serios contratiempos con el
“Tiempo” (un magnífico Sacha Baron Cohen) para saber si es verdad o no el
doloroso suceso.
Farragosa narración con una verborragia
visual empalagosa, “Alicia…” es, sin embargo, un film más amable y luminoso que
el anterior; tiene una fotografía espléndida (Stuart Dryburgh) y una tecnología
fantástica: se utilizaron cuatro barcos históricos en los muelles de Gloucester
(Inglaterra), además de una escenografía general superlativa en palacios con un
diseño de arte espléndido en todos sus rubros
La vedette de la película es la “Cronósfera”, un elemento que utiliza
“Alicia” para guiarse por los distintos estamentos temporales.
La banda sonora de Danny Elfman completa el
cuadro auditivo del film, con una acertada composición incidental que conforma
un personaje más. Destacamos cuatro actuaciones por ser sobresalientes: Johnny
Depp, que parece estar “hecho” para estos personajes tan especiales, Mia
Wasikowska como “Alicia”, Helena Bonham Carter, Anne Hathaway y Sacha Baron
Cohen, comediante y director que tiene un especial histrionismo para roles
específicos.
El mundo visual propuesto por Lewis Carroll
logra en y con el cine grandiosidad plástica, enriquecida por la abrumadora
creatividad visual que emplea James Bobin. Sin embargo, es un film disfrutable
aunque la narración dé la sensación de que se estanca.
Carlos Pierre